14 ene 2011

Palabras sin sentido

Yo nunca seré lo que tu quieres. Soy lo que nunca has buscado. A base de insistir conseguí que te fijaras un poco en mí, y gracias a eso logré entrar en tu vida. Pero maldita la hora. Sólo era el camino hacia mi desdicha. Ahora me debato día sí y día también, no sé si debería haber entrado, o hice mal. Intenté engañar al destino para conseguir lo inalcanzable y ahora me lo hace pagar día tras día.


Y no sé cual es la solución. Desaparecer para siempre, tal vez. Pero no. No puedo imaginar borrarte de mi vida, aunque cada día que pasa me parece un poco más fácil, porque tú me ayudas a ello. Pero siempre vuelves, apareces, y los cimientos de la muralla que había empezado a construir se derrumban de golpe.


No sé cuanto tiempo más podré aguantar así. Sé que llegará el día en que esto explote, y no sé si será para bien, o para mal, ni quiero saberlo.


Odio que no me digas nada en claro. Tú podrías darme la solución, aquí, y ahora, no sé por qué te cuesta tanto... o tal vez sí, pero no quiera saberlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario