20 oct 2011

Crash


Mi vida. ¿Qué demonios estoy haciendo con mi vida?
No entiendo nada, por más que lo intento, por más que me empeño, estas son mis recompensas: nada. Absolutamente nada. Detrás de un golpe, otro, y más fuerte y peor.
Yo intento verlo todo con optimismo, pongo todo lo que puedo de mi parte para que así sea, me conformo con lo más mínimo, busco felicidad en los gestos más pequeños e insignificantes, incluso una pequeña gratificación, pero llega un punto en el que me supera, me puede. Y ya no puedo soportarlo.
Tal vez me estoy equivocando, a lo mejor nunca nací para esto, a lo mejor estoy siguiendo un camino que no me corresponde, no sé a dónde voy, y casi ni siquiera de dónde vengo. Por no saber, no sé ni siquiera a lo que aspiro, ¿realmente aspiro a algo en estos momentos?
Creía que había encontrado todos los motivos por los que luchar, motivos para seguir adelante y no rendirme, había recobrado la ilusión por todo, por la vida. Y de un plumazo, se ha esfumado, una vez más.
¿Tanto pido? Tal vez sea una maldita egoísta, y no me haya dado cuenta todavía, tal vez pido demasiado...
Pero y ahora, qué, ¿tirar la toalla, ahora, a estas alturas? ¿Seguir a base de tropezar una, y otra, y mil veces más?
Pero es que no puedo, no puedo fallar a toda la gente que me apoya y me anima y que está ahí siempre presente, en los peores momentos, que son muchos, y se lo agradezco a todos, de corazón.
No sé qué hacer, la resignación me puede, veo que voy a llegar a una encrucijada, y voy a tener que replantearme mi existencia una vez más, aunque no quiera. Mis fuerzas están al límite. Dije que si esto no se arreglaba abandonaba, que tiraba la toalla, que lo mandaba todo a la mierda, pero es que no puedo seguir así, es un sin vivir continuo. Y está acabando conmigo, y con mi salud.

Hoy debería ser uno de mis días especiales del año, y lo único que hago es llorar, y llorar, y llorar...

¿A veces, simplemente, habrá que ser cobarde? …..

No hay comentarios:

Publicar un comentario